Acá estoy |
La mañana helada acompañaba los pasos... el estruendo insensato murmuraba en silencio, mientras las miradas no eran mas que palabras vacías que solo jugaban en lo alto de las nubes.
El
sol, como candente pedazo de hielo solo posaba inerte frente a las
lágrimas de plata. Cantares de esperanza se revolvían entra cada uno de
los espacios marchitos de repugnancía.
Si
tan solo vivieras esto... - Comentaba una señora. Si tan solo un minuto
fuera suficiente para saciar las ganas de vida que tienen mis
pensamientos.
Si tan solo tuviera ese instante que me robó tu mirada, ese segundo maravilloso que se perdió entre la penumbra de lo prohibido y lo inexplicable de la situación.
Si tan solo tuviera ese instante que me robó tu mirada, ese segundo maravilloso que se perdió entre la penumbra de lo prohibido y lo inexplicable de la situación.
Si tan solo el solo irradiará caricias y las nubes fueran mi paz...
Pero no, no sé puede...
Acá estoy... muriéndome en la fría mañana... robándole una caricia al ego y abrazando mi orgullo.
Acá estoy murmurando vacío... nada más que vacío.
Acá estoy esperando tu regreso... escondido en la mas grande llaga de amor.
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